El trazado de este ilusionante proyecto impulsado por la Diputación de Alicante atraviesa seis municipios, entre ellos Xixona, y contará con 900 hectáreas de regeneración paisajística, 23 kilómetros de senda peatonal y 32 kilómetros de carril ciclista
El Corredor Verde del río Montnegre, un ilusionante y ecológico proyecto impulsado por el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, que fue anunciado el pasado mes de febrero, empieza a caminar.
El compendio de detalles de este proyecto de regeneración del paisaje con fines turísticos, ambientales, educativos y de ocio con el río y el agua como hilo conductor, fue presentado ayer viernes en el ADDA por Carlos Mazón, acto al que acudieron varios alcaldes de la zona afectada, entre ellos Isabel López, alcaldesa de Xixona, uno de los términos municipales más beneficiados por esta futura restauración medioambiental.
Según la documentación en forma de trípticos presentada en el acto, el Corredor Verde se extiende a lo largo de 892 hectáreas de terreno susceptible de ser regeneradas desde el punto de vista ambiental y paisajístico.
Dentro de esa impresionante franja verde entre la desembocadura del río, en El Campello, y el pantano de Tibi, origen de la senda ciclista y senderista, se incluyen 23 kilómetros de senda peatonal y otros 32 de carril ciclista.
Los coordinadores del proyecto, Joaquín Melgarejo, director del Instituto Universitario del Agua y Ciencias Ambientales de la UA, y Miguel Fernández Mejuto, jefe de Tecnología del Agua de la UA, aseguran que el proyecto convertirá el río en un eje de movilidad sostenible y de tracción económica, en alusión a su potencialidad en el ámbito vinculado al turismo rural o de interior. En el acto también participaron la diputada de Ciclo Hídrico, Ana Serna, y la rectora de la Universitat d’Alacant, Amparo Navarro.
Se proyectaron varios videos para virtualmente comprobar la transformación de toda esta impresionante área verde, donde, en el caso de la partida xixonenca de Montnegre de Dalt, aún existe una familia de agricultores tradicionales con un siglo de tradición, los Blay, que suministran a Mercalicante a diario.
Es una de las iniciativas más vertebradoras de la comarca de l’Alacantí, que nace desde un punto de vista técnico, pero también sentimental
Mazón, que ha hecho suyo un proyecto que ya fue anunciado a bombo y platillo hace casi un cuarto de siglo por el gobierno del entonces president de la Generalitat, Eduardo Zaplana, aseguró en el acto de ayer en el ADDA que «es una de las iniciativas más vertebradoras de la comarca de l’Alacantí, que nace desde un punto de vista técnico, pero también sentimental».
Para su financiación, como ya anunció Mazón en febrero, la Diputación y el resto de ayuntamientos implicados confían en las ayudas que lleguen vía Unión Europea. Los senderos arbolados se verán complementados por manantiales, cárcavas, azudes, molinos, ermitas, acequias y huertas. Contará con dos tramos diferenciados, uno llano entre la desembocadura del río y Mutxamel y otro más abrupto entre el término municipal de Alicante y el pantano de Tibi, con Xixona en medio.
En el tramo de Xixona está previsto rehabilitar las antiguas escuelas y la casa del maestro
El proyecto prevé la eliminación de especies invasoras. El blog del turrón y el turismo de Xixona, Made in Jijona, ya ha recogido en varias ocasiones las denuncias del pastor y los agricultores de la zona sobre la selva de cañas que puebla casi la totalidad del cauce del río, desde el mismo puente de Montnegre de Dalt, aguas abajo. Ese enorme cañaveral no se limpia desde el año 1979, lo que reduce la movilidad desde hace muchas décadas y aumenta potencialmente el riesgo desbordamiento en caso de grandes avenidas. En su perfil de Facebook, la alcaldesa de Xixona, Isabel López, asegura que está previsto «acabar con las cañas».
La primera edil también asegura que «en el tramo de Xixona está previsto rehabilitar las antiguas escuelas y la casa del maestro, las ermitas y poner en valor los cultivos tradicionales. Este proyecto es un sueño y queremos hacerlo realidad. Todo preparado para presentarlo a los Fondos Europeos».
Un proyecto que nace viciado, porque se sustenta en poner en valor una inmensa balsa de mierda. Si este proyecto quiere tener unos cimientos adecuados, hay que regenerar el pantano, ponerlo en uso, conseguir que las aguas que llegan al pantano lleguen correctamente depuradas. Hay que dragar el pantano y eliminar los lodos presuntamente tóxicos que almacena. En la Foia de Castalla existen depuradoras de aguas residuales, que funcionen adecuadamente. Eso es lo que hay que plantear, antes de hacer un corredor verde que comienza en una gran vergüenza. Una de las obras de ingeniería civil históricas más emblemáticas que almacena una gran vergüenza: aguas residuales incorrectamente depuradas.
Gracias por participar en el foro abierto e independiente del blog Made in Jijona.